



La saturación de los colores
Estudiar los colores para obtener un resultado preciso no es nada fácil
La correcta combinación cromática puede hacer un espacio cálido y acogedor o todo lo contrario. así pues, conocer los principios del funcionamiento de los colores es necesario para utilizar la correcta tonalidad a fin de obtener el resultado deseado. Cada color primario, secundario y terciario corresponde a un nivel de saturación o luminosidad máxima, es decir, sin negro, blanco o gris añadido. El color es descrito en términos de valores, los cuales corresponden a las diferentes variaciones de luminosidad de un color y a las cantidades relativas de negro y blanco que contiene. Desde el blanco añadido en cantidades sucesivas hasta los doce colores, se producen “valores claros”. El rosa, por ejemplo, es un valor claro del rojo primario. La adición sucesiva de negro o de gris a un color dado produce “valores oscuros”. Así, el marrón es un valor oscuro del rojo.
“La Armonía de los colores”.
TINA SUTTON-BRIDE M. WHELAN
La saturación de los colores
Estudiar los colores para obtener un resultado preciso
no es nada fácil
La correcta combinación cromática puede hacer un espacio cálido y acogedor o todo lo contrario. así pues, conocer los principios del funcionamiento de los colores es necesario para utilizar la correcta tonalidad a fin de obtener el resultado deseado. Cada color primario, secundario y terciario corresponde a un nivel de saturación o luminosidad máxima, es decir, sin negro, blanco o gris añadido. El color es descrito en términos de valores, los cuales corresponden a las diferentes variaciones de luminosidad de un color y a las cantidades relativas de negro y blanco que contiene. Desde el blanco añadido en cantidades sucesivas hasta los doce colores, se producen “valores claros”. El rosa, por ejemplo, es un valor claro del rojo primario. La adición sucesiva de negro o de gris a un color dado produce “valores oscuros”. Así, el marrón es un valor oscuro del rojo.
“La Armonía de los colores”.
TINA SUTTON-BRIDE M. WHELAN